Misa y homenajes a cinco años de la tragedia de los ocho obreros

Los familiares de los ocho obreros muertos al derrumbarse un edificio de la calle San Martín 652 de la ciudad de Corrientes, realizaron ayer un homenaje al cumplirse cinco años de la tragedia, a la espera de que la causa judicial llegue a la instancia de juicio oral y público, lo cual se vio dilatado debido a las apelaciones hechas por las defensas de al menos uno de los cuatro acusados, a la resolución de la jueza del caso, Graciela Ferreyra, de elevar el expediente a la siguiente instancia procesal. Pasado el mediodía un grupo de más de 20 personas se congregó fuera de la inconclusa torre del barrio Camba Cuá. Colocaron carteles delante del chaperío de la entrada, prendieron algunas velas y dejaron que las lágrimas que les brotaban se escurrieran por sus rostros. Luego se ofició una misa en memoria de los operarios, la mayoría padres y jefes de familia, fallecidos el 22 de marzo de 2012 al colapsar la cúspide de la edificación. También estuvieron los vecinos afectados por la construcción.

“Sigo luchando por encontrar un poco de justicia: no pedimos otra cosa, solamente que se haga justicia; ellos murieron trabajando”, afirmó ayer a la mañana Rosa Urbina, madre de Diego Rodríguez, una de las víctimas de aquel luctuoso episodio. La mujer recordó además que su abogado, Rubén Leiva, les informó que uno de los imputados, el ingeniero calculista Elías Cohen, apeló la elevación a juicio de la causa dictada por la jueza Ferreyra, titular del Juzgado de Instrucción en lo Penal Nº 6. La acción cayó mal entre los familiares, que la ven como un intento más de retrasar la llegada de una sentencia para los responsables de la obra. “En los cinco años tuvimos que vivir esto: ningún fallo de la Justicia fue a nuestro favor”, remarcó Urbina en declaraciones a la emisora Sudamericana.s