Ara San Juan: 4 años del último contacto
El 15 de noviembre de 2017, cuatro años atrás, el submarino ARA San Juan estableció lo que sería su último contacto con tierra, mientras navegaba por aguas argentinas con 44 tripulantes a bordo, a lo que siguió una intensa búsqueda que culminó con el hallazgo de restos de la nave, un año más tarde.

La nave clase TR-1700, de 66 metros de largo y 3,6 de ancho, perdió contacto con la Armada a las 7.19 del miércoles 15 de noviembre de 2017, ocho horas después de que el jefe de operaciones del submarino informara sobre un principio de incendio en el tanque de baterías número 3, provocado -presuntamente- por el ingreso de agua por el sistema de ventilación, y que terminó provocando su hundimiento.
Al momento de su desaparición, el buque navegaba a la altura del golfo San Jorge, en medio de un fuerte temporal, mientras patrullaba la zona para tratar de identificar buques que pescaran ilegalmente dentro del espacio marítimo argentino. Los restos del navío, desaparecido junto a sus 44 tripulantes desde el 15 de noviembre de 2017, fueron localizados el 17 de noviembre de 2018 en el lecho marino, a unos 800 metros de profundidad en el Atlántico Sur. La última posición conocida fue en el área de operaciones del mencionado golfo, a 240 millas náuticas (432 kilómetros de la costa) al sudoeste de la península Valdés, y recién un año después, el 17 de noviembre de 2018, la empresa privada Ocean Infinity informó el hallazgo del submarino, muy cerca del punto del último contacto y a 907 metros de profundidad. Dos años más tarde se conoció que el gobierno del ex presidente Mauricio Macri ocultó a los familiares y a la opinión pública que habían ubicado al submarino el 5 de diciembre de 2017, gracias a las declaraciones de uno de los oficiales de la Armada procesados, Enrique López Mazzeo, que lo reveló en la causa que tramitaba en la Justicia federal de Caleta Olivia. Según el testimonio, desde esa fecha, veinte días después de la desaparición de la nave, se mantuvo la reserva hasta que el 17 de noviembre de 2018 fue informado a la opinión pública. Pero, además, en septiembre del año pasado se dieron a conocer detalles de actos de espionaje ilegal realizados a los familiares de los tripulantes del ARA San Juan, en momentos en el que el submarino aún permanecía desaparecido, entre enero y junio de 2018