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JUICIO POR LA MUERTE DE OBREROS EN 2012

Causa Derrumbe: declaró la madre  de una de las víctimas y pidió justicia 

María Rosa Urbina contó al Tribunal Oral Penal 1 cómo la tragedia cam­bió su vida. También declararon las concubinas de dos fallecidos. 

Tres mujeres declararon ayer en el juicio por la muer­te de los 8 obreros en un derrumbe ocurrido en 2012 en el barrio Cambá Cuá de la ciudad de Corrientes. En­tre ellas estaba María Rosa Urbina, madre de una de las víctimas y estandarte de la lucha por justicia. El Tri­bunal Oral Penal Nº 1 dio continuidad así a la ronda de las testimoniales en la causa que se sigue contra Marcelo Mayer, Walter Bru­quetas y Carlos Valenzuela por el delito de "estrago cul­poso agravado por poner en peligro de muerte a alguna persona y causar la muer­te de alguna persona". Las familiares de los fallecidos fueron la señora Urbina y Haydeé Nancy Itatí Riveros, respectivas madre y concu­bina de Diego Rodríguez, uno de los operarios falleci­dos, ambas son querellantes y actoras civiles. También se citó a Alicia Nelly Ojeda, viuda de William Arnaldo Valenzuela y querellante.

Antes de ingresar a la sala de debates, Urbina habló con la prensa y manifestó: "Vengo a contar lo que fue nuestra vida antes del de­rrumbe y cómo quedamos. Es mi oportunidad para que los jueces me escuchen. Voy a contar lo que fue mi hijo en vida, la vida que teníamos planificada, sus proyectos para él y su familia que se truncaron ese día’. La pro­genitora, quien encabezó las masivas marchas al comien­zo de la causa que salpicó al Gobierno municipal de turno, expresó: "Les voy a decir a los jueces que estoy muerta, mi vida cambió mu­cho desde que Diego no está, han sido 10 años muy duros para llegar a este momento. Va a ser difícil rememorar pero quiero que me escu­chen, poder hablar y contar nuestra historia". 

El hecho ocurrido el 22 de marzo del 2012, cuan­do 11 obreros trabajaban en altura en una obra con el hormigonado de una esca­lera ubicada debajo del tan­que de agua. Al no tener la mezcla vertida, se produjo el derrumbe del encofrado del tanque con el hormigón bombeado dentro de él, provocando la muerte de 8 personas que cayeron al vacío. Se consideró que hubo fallas graves en la supervisión y control en el armado del encofrado que resultó defectuoso por insuficiencia de sus apuntalamientos.

Los fallecidos fueron Die­go Hernán Rodríguez, Mar­cos Ramón Ricardo Gonzá­lez, Jorge Ismael Acevedo, Eduardo Luciano Acevedo, William Arnaldo Valenzue­la, Ramón Valentín Zaca­ríaz, Enrique Eduardo Fa­bián Sosa, y Paulo Alejandro Medina. Quienes recibieron lesiones graves fueron Luis Alberto Pelozo y Nelson Adrián Valenzuela, y lesio­nes de carácter leves José Augusto Molina.

El tribunal está compues­to por los doctores Raúl Juan Carlos Guerín, Cynthia Te­resita Godoy Prats y Ana del Carmen Figueredo. El proce­so contra Mayer, Bruquetas y Valenzuela se reanudará la semana próxima cuando está previsto que comparez­can otros testigos incluidos en la ronda de declaracio­nes. Al ritmo impuesto ha­cia mediados del segundo semestre se estaría llegando a la instancia de alegatos por lo que antes de fin de año podría haber una sentencia aunque dependerá de si sur­gen o no incidentes. s

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