El incremento de las tarifas de la luz, otra carga al proceso inflacionario
Se hicieron tres audiencias públicas para determinar los nuevos valores del gas, la energía eléctrica y el esquema de segmentación.
Al cabo de las tres audiencias públicas realizadas en el transcurso de la semana que acaba de terminar, donde el Gobierno nacional presentó su plan de incrementos en las tarifas de electricidad y gas y los criterios que se tomarán en cuenta para decidir una quita de subsidios, quedó un poco más claro el panorama de cara al invierno con los nuevos cuadros de valores. En concretos, se ratificó un aumento de las tarifas, lo que significará más presión inflacionaria.
El incremento, que según la versión oficial, en promedio ronda el 17% se suma a las subas ya formalizadas. En Corrientes también habrá un aumento, dijo el contador Alfredo Aún, titular de la Dpec, pero no hay precisiones de la fecha ni el porcentaje. -Ver página 4-
Por lo pronto según surgió de la ronda de audiencias públicas realizadas en Buenos Aires los nuevos valores y el esquema de segmentación de subsidios tendrán vigencia a partir de junio. Sin embargo, de acuerdo a la información de las empresas distribuidoras, recién se verán reflejados en las facturas que reciben los usuarios en un plazo de al menos dos meses. Es que una vez publicados los cambios en los cuadros tarifarios, la facturación de los consumos se basa en un ciclo de dos meses, que es el período de lectura de los medidores, y se divide en dos pagos.
Las subas propuestas para la electricidad en el Amba fueron de 16,52% para los usuarios sin tarifa social y de 6,88% para los consumidores con tarifa social. En tanto, para el servicio de gas en todo el país, los usuarios con tarifa social no tendrán aumentos y las subas proyectadas para el segmento medio van desde 18,5% hasta 25,5%, de acuerdo a las distintas zonas, donde operan distintas empresas distribuidoras. Por su parte, los clientes de alto poder adquisitivo dejarán de percibir subsidios y pagarán el precio pleno del servicio, que se estima implicará una suba del 150%. La estimación oficial es que serán 921.778 titulares, en el caso de la energía eléctrica, y 760.600 en el de gas residencial.
Solución de corto plazo
Jorge Pascualini, de la Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza, subrayó durante la audiencia del pasado jueves que "los subsidios energéticos son una solución de corto plazo, pero pueden agravar el problema en el largo plazo", por lo que se pronunció en favor de una segmentación concentrada en la asistencia a los sectores vulnerables.
PROBLEMAS DE IMPLEMENTACIÓN
El proceso demorará
Claudio Bulacio, representante de la Asociación de Distribuidores de Energía Eléctrica (Adeera), alertó por problemas de implementación de la segmentación tarifaria, sobre todo por la información requerida para la vinculación entre el usuario y el titular. "Se requiere adecuar los sistemas comerciales y de facturación de las empresas y este proceso no puede demorar menos de dos meses, 60 días como mínimo", detalló. "El esfuerzo para reducir subsidios es marginal. No se reducen significativamente", explicó.
En el marco de la última jornada de audiencias públicas para definir el nuevo esquema para las tarifas de luz y gas, el ministro de Economía, Martín Guzmán, defendió la iniciativa llevada adelante por el Gobierno en la materia y se preguntó sobre cuál sería el sentido de seguir subsidiando el consumo de energía de "sectores pudientes". Señaló que se está implementando "un sistema para ir corrigiendo esa deficiencia", ya que "no conviene tener 2,5 o 3 puntos de subsidios energéticos. Hay que ir dándolo vuelta e invertir esos recursos en obra pública, en rutas, en puertos", remarcó.
Según los datos de la Secretaría de Energía, hoy el Estado cubre más del 75% del costo del gas y de la electricidad que se incluye en las facturas. Lo hace a través de subsidios que surgen de la diferencia entre el precio que pagan los usuarios y el costo de generación o adquisición del suministro. La propuesta es que comiencen a pagar la tarifa plena los titulares con ingresos equivalentes a 3,5 canastas básicas totales (unos $313.916 en marzo), tres o más inmuebles, tres o más vehículos de menos de 5 años de antigüedad o sean propietarios embarcaciones de lujo o aeronaves. Para los usuarios del Amba también se tomarán en cuenta criterios geográficos: dejarán de recibir subsidios quienes vivan en los 13 barrios identificados por el Enre como de alta capacidad de pago. Accederán a la tarifa social y mantendrán los niveles de subsidios quienes vivan en los barrios populares identificados por el Renabap; titulares de programas sociales; empleadas domésticas; jubilados, pensionados, beneficiarios de pensiones no contributivas, monotributistas y trabajadores en relación de dependencia que perciban una remuneración bruta menor a dos salarios mínimos; entre otros.
Las empresas distribuidoras de gas destacaron que la puesta en marcha de los ajustes que se aprueben llevará al menos unas ocho semanas. "La segmentación requerirá las modificaciones necesarias en los sistemas informáticos, que tendrán un costo no previsto para la compañías", dijo Daniel Martini, director ejecutivo de la Asociación de Distribuidores de Gas (Adigas). Por instrucción del Enargas, las empresas enviaron comunicaciones a más de 3 millones de usuarios para que regularicen la titularidad, pero aseguran que solo respondió el 2,5% del total.
De acuerdo a la información oficial y a las pautas fijadas en el acuerdo con el FMl, los próximos aumentos serán los últimos de este año, ya que el tope para todo 2022 es de 40% del Coeficiente de Variación Salarial (CVS) del año anterior para los usuarios de tarifa social y de 80% del CVS para el segmento medio de usuarios.
Como la variación salarial fue de 53,4%, las tarifas no podrán incrementarse más de 21,4% y 42,7% respectivamente.
Las dudas
Varios expositores mostraron disconformidad con el proyecto y explicaron que se deben pulir algunos puntos. María José Lubertino, de la Asociación Ciudadana por los Derechos Humanos, manifestó como "un error" la segmentación geográfica en el Amba porque generaría una división entre "barrios de ricos y barrios de pobres". En general se plantearon dudas sobre segmentación de tarifas de los servicios de gas natural y electricidad porque no cuentan con la información de las condiciones socioeconómicas de los usuarios. No quedó claro aún si la segmentación se aplicará en el interior del país.
EMILIO APUD
"Los subsidios tienen que desaparecer"
Emilio Apud, ex secretario de Energía de la Nación, dio su punto de vista sobre los incrementos de la energía en todo el país. "Está retrasado el aumento de energía a nivel nacional, se está escondiendo la realidad con el subsidio que da el Estado. Los subsidios tendrían que desaparecer, pero no sé en qué plazo porque también entiendo que la situación económica actual no alcanza tampoco para pagar la tarifa completa", dijo durante una entrevista con Radio Sudamericana .
"Es imposible sostener subsidios en forma indiscriminada por todo este tiempo, estoy de acuerdo con que haya subsidios a la tarifa social para las personas que realmente no pueden pagar toda la tarifa, pero el resto debe pagar", dijo. "La caída de la calidad del servicio es porque no hay inversiones", agregó.
"Hasta 2002 la energía no tenía subsidios, y no había problemas, había expansión, inversión, etc. Pero vino el populismo energético y ya vemos lo que pasó. Recuerden lo que fue 2014 con los cortes de energía", finalizó