El humanismo se impone al metaverso en Mburucuyá
Pusieron en escena la obra "La Sagrada Familia", una readaptación de la obra de Pandolfi, en el Club Unión, con gran respuesta del público.

Gran velada del Teatro vocacional Mburucuyá en el club Unión con la obra "La Sagrada Familia". El teatro es un género literario creado para ser representado. Es el arte de componer obras dramáticas. Las artes escénicas tratan todo lo relativo a la escritura, la interpretación, la producción, los vestuarios y los escenarios. Drama tiene origen griego y significa "hacer", y se asocia a la idea de acción. Se entiende por drama la historia que narra los acontecimientos de unos personajes.
Tiene su origen en las danzas realizadas por el hombre primitivo alrededor del fuego. Estas escenas tuvieron repercusión en China, Japón e India. En la coronación de los faraones se hacían representaciones teatrales simbólicas. En Grecia nació el edificio público destinado a la representación, los grandes teatros que después los romanos los implementaron en su gran Imperio.
El teatro se ha utilizado como complemento de celebraciones religiosas, como medio para divulgar ideas políticas, para difundir propaganda, como entretenimiento y como arte. También se conoce como teatro el edificio donde se representan las obras dramáticas.
"En Mburucuyá se representó ‘La Sagrada Familia’, una adaptación de la obra ‘La Conspiración de los Pandolfi’, con gran soltura, espontaneidad y gran profesionalidad vocacional por parte de Aurora (señora de Pandolfi): Mónica Canteros; Francisco Pandolfi (padre): Franco Cáceres; Carlos Pandolfi (hijo mayor): Miguel Chamorro; César Pandolfi (hijo menor): Mirko Enriques; Carmen Pandolfi (hija, novia del aviador): Aura Verón; Celia Pandolfi (hija menor): Lucía Andreu; Isabel (esposa de César): Rita López; Javier Harrys (aviador): Jair Jalfon; Mariana (aviadora): Laura Corzo; Lulú (novia del Sr. Pandolfi): Soledad Aromí; Policía Federal: Jonatan Galarza; padre de la criatura alquilada: Leonardo Luis Sotelo; todos ellos bajo la dirección de Amalia Salazar. El traspunte de Beti Miqueri, apunte de María Ofelia Aromí y la escenografía de Ávalos Daniel", comentó José Miguel Bonet.
La obra representa a una familia de 4 hijos y 2 yernos, cuyos padres están separados y traman una confabulación para volver a unirlos. Ocurren momentos cómicos y al final logran su cometido, y tiene 3 actos.
"El término ‘humanismo’ se ha vuelto casi inutilizable por su vaguedad. El mundo de las letras habla de la importancia de las humanidades, pero sin tomarse el trabajo de explicar el porqué. Es lo que se llamó la pereza de los humanistas. Tal vez piensan que el buen paño en el arca se vende y que ellos están vendiendo material de excelente calidad, pero este adaggio comercial no funciona en la actualidad. En un mundo cada vez más tecnificado, las humanidades han quedado como un adorno y hoy resucita vigorosa como en esta obra de teatro", finalizó Bonet en diálogo con NORTE de Corrientes.