Ratifican condena a un joven que violó a niña de 13 años
El sujeto le puso droga en el tereré a la menor, quien perdió el conocimiento.

La Corte Provincial mediante sentencia Penal Nº166/22 confirmó la decisión del Tribunal de Juicio de Paso de los Libres que condenó a Jonathan Gómez a la pena de 9 años y medio de prisión por los delitos de Abuso Sexual con Acceso Carnal y Coacciones en perjuicio de una niña de 13 años. El hecho ocurrió entre las 22 del 22 de octubre y las 0 del 23 de octubre de 2020. El muchacho de 19 años invitó a la niña de 13 a ir a una plaza a tomar "mate-tereré", y cuando estaban allí comenzó a insistirle en mantener relaciones sexuales a sabiendas de la edad que tenía, a lo que la menor respondió que "no". Ante las reiteradas negativas la invitó a dar un paseo. Al llegar a una plaza preparó "tereré" y aprovechó para colocar una sustancia psicotrópica llamada "benzodiacepina".Aprovechó que la niña no podía consentir libremente la acción y abusó de ella. Al volver al estado de conciencia le dijo que se había desmayado, aunque le advirtió que no contara nada porque de lo contrario "le iba a pasar algo", configurando de ese modo el delito de coacción. La defensa particular solicitó que se absolviera al hombre basándose en que no existía una sola prueba o dato objetivo que determinara la certeza necesaria para fundar una condena, y que demostrara que la relación sexual haya sido en forma no consentida por la víctima, porque existía una relación de noviazgo. Argumentó que no se probó que la benzodiacepina hallada en la muestra de orina de la víctima fue realmente proporcionada por el imputado. Se basó en el testimonio de uno de los peritos que indicó que esa droga era usada en los hospitales y que pudo ser utilizada para la anestesia de la menor. La causa fue tramitada en el nuevo Código Procesal Penal. En ese sentido, el doctor Alejandro Alberto Chaín señaló que el actual sistema acusatorio permite que no sólo el fiscal y la querella aporten pruebas sino también la defensa, es decir, el abogado podría haber citado a los anestesistas que intervinieron, proponerlos como testigos e interrogarlos para fundamentar su teoría. "Ya no es válida la afirmación de que la defensa sólo resiste los embates del acusador, el nuevo proceso reivindica precisamente la posición de la defensa", explicó.