Combustibles: confirmaron un aumento de hasta un 4%
La medida se debe a una actualización a nivel nacional de los impuestos que estaban congelados desde hace casi un año y medio.

La actualización del impuesto sobre los combustibles líquidos correspondiente a todo 2021 comenzará a regir desde hoy, sábado, de acuerdo a lo establecido en la última definición del Gobierno, que esta vez decidió no volver a postergar su aplicación.
Así lo anticipó el jueves por la noche la secretaria de Energía, Flavia Royón, quien indicó que "a partir del 1 de octubre habrá un aumento de combustibles por el descongelamiento de impuestos y será de entre 1% y 4%, dependiendo si es nafta o gasoil".
De esta manera, el gravamen aumentará tal como lo estableció la Ley 23966, que fijó que en enero, abril, julio y octubre de cada año se actualiza el impuesto a partir de la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) que suministre el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
En este caso la actualización que se realiza corresponde a los dos primeros trimestres de 2021, que fueron sucesivamente postergadas por decreto presidencial.
Los valores actuales de los combustibles de YPF en la ciudad de Buenos Aires son para el litro de nafta súper de YPF $130,50; nafta premium $159,80; gasoil $135,70 y gasoil premium $185,50.
En el caso de Shell en el distrito porteño está en $130,50 el litro de nafta súper; $159,80 el de nafta premium; $135,70 el de gasoil; y $185,50 el de gasoil premium. Y en el de Axion, también para la Ciudad de Buenos Aires, son de $134,20 para el litro de la nafta súper; $163,50 para el de Quantium nafta; $147,10 para el del diésel; y $188,30 para el de Quantium diésel.
A fines de agosto último el Gobierno postergó por tercera vez en el año la actualización del impuesto sobre los combustibles líquidos. Resultó la sexta postergación de la aplicación del impuesto que este año ya se prorrogó en febrero y en junio. En la última oportunidad se determinó que las actualizaciones correspondientes a los dos primeros trimestres de 2021 se aplicarían el 1 de octubre; y las del tercero y cuarto trimestre del año pasado y del primero y segundo trimestre de este año quedaron para el 1 de enero de 2023.
Este incremento en el precio de los combustibles, que representa un nuevo golpe al bolsillo, se adopta en medio de un escenario en el que persiste el faltante de este insumo clave a la par que se registran sobreprecios según las zonas. s
La nafta súper subió un 45,5% en el año
En la Caba el precio por litro de la nafta súper en YPF aumentó 45,5% en lo que va del año, frente a una inflación acumulada (hasta agosto) de 56,4%. El 1 de enero costaba 90,40 el litro; hoy vale 131,60 pesos. Los combustibles solo explican un 4,2% de la variación mensual del IPC. Es decir, un aumento de 10% en el precio de los combustibles implica una suba de 0,42% en el IPC. En el aumento de combustibles que se implementó a nivel nacional durante mayo, la suma promedio fue del 9% y se explicó que la decisión se tomó a partir de: la evolución de los costos asociados a la refinación y comercialización; el incremento de los precios locales de biocombustibles producido por terceros y que los comercializadores deben adquirir a precio regulado; y el sostenido aumento de los precios internacionales de los combustibles que es necesario importar para complementar la refinación local.
En los últimos doce meses hasta agosto, las naftas habían acumulado un incremento del 32% y el gasoil del 51% (41,7% en promedio entre ambos combustibles), muy por debajo de la inflación anual del 78,5%. La venta de combustibles muestra una sostenida caída en los últimos meses, con lo cual este nuevo incremento puso en alerta a los dueños de estaciones de servicio que sienten la caída de la recaudación. La variación se encuentra por debajo de la evolución presentada por el IPC y de los precios relativos de la economía, remarcaron. El pasado 21 de agosto, los valores en naftas y gasoil tuvieron un incremento promedio de 7,5%, que involucró un 8,5% para las naftas y un 6% para el gasoil. Según un cálculo de consultoras privadas especializadas en combustibles, el Estado dejó de recaudar por esta vía cerca de US$1.800 millones. s
En los últimos doce meses hasta agosto, las naftas habían acumulado un incremento del 32% y el gasoil del 51%.