Protesta en la playa y en el río contra las restricciones pesqueras

Los pescadores comerciales interrumpieron la circulación en el canal de navegación. Hubo un principio de acuerdo.
La protesta de decena de malloneros en el río Paraná y en la costa correntina durante la mañana de ayer, tuvo que ver básicamente con las diferencias en los permisos de pesca que rigen para Corrientes y Chaco.
Los pescadores comerciales denunciaron persecución por parte de la Prefectura, y que en Corrientes sólo pueden pescar tres días a la semana y en un sector del río está totalmente prohibida, desde una línea imaginaria entre la Isla del Cerrito (en la zona de confluencia) y la Cabaña "Don Julián" en Paso de la Patria, hasta la zona llamada "El 15" o los Cables río arriba.
El problema se suscita porque los malloneros correntinos pescan en aguas jurisdiccionales de Chaco, donde rige una veda extendida que permite cinco días de pesca a la semana, pero los malloneros chaqueños, cuando acceden a aguas correntinas donde rige una veda de tres días (lunes, martes y miércoles) se encuentran con que la Prefectura y Recursos Naturales secuestra las redes y los multan. La escalada llegó al punto que interrumpieron la circulación en el canal de navegación.
"Somos discriminados y estamos siendo perseguidos porque somos correntinos y chaqueños. El director no sabe las consecuencias y hay 3.000 familias perjudicadas. Nos cansamos de ser perseguidos por gente de la Prefectura y dicen que el carnet correntino ‘no dice en Chaco y viceversa’", señaló uno de los malloneros.
No obstante, debido al reclamo, fueron recibidos por funcionarios de Corrientes y de la Prefectura. "Llegamos a un acuerdo y logramos que los muchachos puedan trabajar. Ahora ambas provincias pueden pescar tranquilamente", expresó Miguel Cristaldo, presidente de la Asociación de Malloneros de Corrientes en declaraciones a radio Sudamericana. "A partir de hoy, y a través de un acta firmada por diferentes representantes, tanto pescadores correntinos como chaqueños podrán llevar a cabo su actividad con libertad en el río Paraná". Y adelantó: "El grupo especial de la Prefectura va a tener que dejar trabajar a los pescadores, siempre y cuando tengan las licencias correspondientes. Tendrán que hacer procedimientos diferentes a partir de ahora". Y concluyó: "Se labró un acta, en donde representantes de Chaco y Corrientes dejaron sus firmas. A partir de este momento los pescadores podremos comenzar a llevar a cabo nuestra labor de manera normal".
La veda extendida

El director de Áreas Protegidas de la provincia del Chaco, Edgardo Wiltchiensky, consideró que no hay justificativos técnicos para fijar una veda pesquera. Esta declaración la hizo respecto de las disposiciones vigentes establecidas por Corrientes.
En declaraciones a la radio de la Unne, el funcionario explicó que "históricamente hubo reglamentaciones que no estuvieron acorde entre ambas provincias. Esto responde a que cada una rige sus recursos. En el Chaco está rigiendo hace 11 años la veda extendida, que permite 5 días de pesca a la semana, y hace 3 años rige un sistema de semaforización, producto de la bajante".
"Los argumentos están basados en cuestiones técnico-científicas. Pero entendemos que la pesca abarca más allá de estas cuestiones, como las comerciales y las deportivas. El sector del río vedado es jurisdicción de Corrientes, no todo el río, hasta la Isla del Cerrito. Las aguas jurisdiccionales chaqueñas. La pesca comercial se realiza en canchas determinadas", explicó.
A su vez, expresó: "Si consideramos la semaforización no vemos justificativos técnico-prácticos para fijar una veda. Eso se creó para tener una protección todo el año, si bien se está en una época de desove".s