Chaco Corrientes SoyNorte Club
Para ver esta nota en internet ingrese a: https://www.nortecorrientes.com/a/186115
ENTREVISTA A LA MAESTRA DE ESCRITORES

El Más allá... de Myrna Neumann y otra obra con la que busca dejar una huella

A un mes de la presentación de un libro, la autora dará a conocer otro título. Será este jueves 14, a las 19 en el Museo de Bellas Artes.

Como si fuera una maratón de presentaciones, la escritora Myrna Neumann de Rey, se prepara para la segunda etapa, en la que lanzará el segundo de tres libros de cuentos. Hace poco más de un mes, el 11 de agosto, en el Museo de Bellas Artes "Juan Ramón Vidal" se conocieron los cuentos de "Las señoritas de enfrente", en tanto, este jueves 14 a las 19, en el mismo sitio, presentará otro libro con narraciones: "Más allá del ocaso", y la tercera también tiene fecha: el 12 de octubre en el mismo horario y lugar, se presentará "Antología". Una verdadera carrera, en la que sólo una "maratonista literaria" como es Myrna puede lograr.
Pero no solo es la única autora que puede presentar tres libros en tres meses, sin ningún apuro, más que el disfrutar de las veladas literarias y dar a conocer las obras, sino que se atreve a jugar con títulos parecidos.
Contra toda opinión, redobla la apuesta y titula su libro Nº 30 con la expresión "Más allá". "Más allá del ocaso" es el sexto de las obras (entre cuentos y novelas) con esa expresión y se suma a: "Más allá del tiempo", "De la bruma más allá", "Más allá de...", "Acaso más allá" y "Más allá del asombro".
Cualquiera pensaría que la autora está obsesionada con el más allá. Al respecto explicó que es una expresión que para ella utiliza como metáfora: "Siempre hay un más allá de algo. En este caso, el ocaso al que me refiero es el ocaso de mi vida. Y se trata de una expresión de deseo que espero la compartan. Mi aspiración es que, más allá de mi ocaso, me recuerden evocándome a través de estos doce cuentos que escribí con ese fin".
No es para ponerse tristes porque ella esté pensando en que será su última obra, ni mucho menos; pese a que lo mencionó en varias oportunidades y a varios amigos y conocidos, la posibilidad de dejar retirarse de la literatura con su libro Nº 30; no obstante, es difícil que ocurra porque durante la entrevista menciona que estuvo escribiendo nuevos cuentos, y que todavía sigue aprendiendo y leyendo mucho, lo cual deja a las claras que hay Myrna para rato.
De todos modos, si ella decidiera "retirarse" este año de presentar nuevos libros (lo cual es una posibilidad y eso explicaría también la maratón de presentaciones de tres libros en tres meses), nadie podría criticárselo. A los 86 años y con 53 de carrera literaria, tiene una vasta producción como para hacerlo. No obstante, las historias y los cuentos continúan brotando de su mente ágil. Tal vez lo que ocurre es la autoexigencia y la energía extra que requiere y que siente que debe volcar en cada nueva obras a publicar, lo mismo que ocurrió cuando decidió cerrar su taller Tanaypo.

LOS 18 AÑOS DE TANAYPO
Una importante cantidad de escritores correntinos de las últimas tres décadas pasaron por su casa de la calle San Lorenzo, donde dictó el taller de narrativa y poesía (de ahí el nombre), desde 1992 hasta el 2010. Por eso, se la llama en Corrientes como Maestra de escritores.
Fueron 18 años muy fructíferos, de mucha enseñanza literaria, pero también de mucha producción. Salvo contadas excepciones, como el taller literario Koeyú, dependiente de la Universidad Nacional del Nordeste, o algún otro, no había en esta Capital espacios de formación, lectura y de escritura. Myrna, que ya se había jubilado como docente y tras intentar participar de otros espacios, decidió animarse y crear Tanaypo. Durante la entrevista confesó que cada año al finalizar las clases y editarse el clásico libro "Cuentosversos" que reunía una selección de las obras más destacadas de los talleristas, ella se sentaba a analizar, leer, evaluar sus clases y durante los meses de verano, armar un nuevo programa de contenidos, para los asistentes al taller. "Armaba, como en la escuela, un programa pedagógico de contenidos, con nuevas lecturas y estilos literarios", comentó.
Un trabajo muy serio y responsable. En junio de 2010 falleció su esposo, y Myrna cayó en una depresión, pese a ello pudo darse cuenta al sentir que no podía abandonar su trabajo semanal con el taller. Su autoexigencia de que todo tiene que salir bien y correcto: "No podía permitirme que mi taller Tanaypo tuviera un nivel menor, sentía que no podía dar el 100% de como había estado acostumbrada en ese momento, por eso lo cerré".
A lo largo de esos años, ella vio crecer y consagrarse como escritores de trayectoria a varios de sus talleristas, y de esa etapa quedaron grandes amistades. 
Hoy, más allá de la metáfora del más allá, ella admite que su intención es perdurar, que más allá de ella, su obra sea todo un legado, y nadie duda de que será así. (MM)