Rosh Hashaná arrancó con introspección y reflexión
Los integrantes de la comunidad recibieron el año 5784, que comenzó ayer con la salida de la primera estrella.
El Rosh Hashaná (Año Nuevo judío) comenzó ayer viernes por la noche, en conmemoración de la creación de Adán y Eva, según el relato

bíblico, y marca el inicio de los diez días sagrados que incluyen el Iom Kipur (Día del Perdón), que este año se conmemora entre el domingo 24 de septiembre y el lunes 25.
Shaná Tová Umetuká ("Año bueno y dulce" en hebreo) son los deseos que cruzan los integrantes de la comunidad judía con la llegada del año 5784, que comenzó con la salida de la primera estrella de este viernes, cuando ingresaron a "un período de introspección, reflexión y balance del alma" camino al Iom Kipur o Día del Perdón, que se inicia 10 días después.
A través de sus redes sociales, el gobernador Gustavo Valdés expresó sus salutaciones por el Año Nuevo judío a la colectividad que inició su celebración este viernes, hasta el domingo por la tarde. "Shaná Tová Umetuká a la colectividad judía!", manifestó el mandatario por medio de las plataformas, augurando que "a partir de la salida de la primera estrella y con el inicio de un nuevo año, la comunidad viva 365 días de prosperidad y paz".
En este tiempo la comunidad judía lleva a cabo un momento de meditación e introspección para poder autoexaminarse, hacer un balance de los actos y rectificarse a partir de plegarias de arrepentimiento. El toque del shofar es el momento más importante en esta festividad y simboliza el clamor del pueblo judío a Dios de reconocerlo como creador y rey eterno.
La festividad se realiza en las sinagogas y en los hogares, la primera funciona como espacio de encuentro en donde se leen plegarias alusivas y hacen sonar el tradicional shofar en una celebración esencialmente comunitaria. "Es una especie de cumpleaños de toda la creación, especialmente del ser humano, y acompaña la alegría con la preocupación sobre qué estamos haciendo con nosotros mismos y con toda esta obra de creación", precisó a Télam Marcelo Polakoff, rabino de la comunidad judía de Córdoba.
El año se celebra durante dos días, entre otros múltiples sentidos, "para dar una idea de que siempre hay una segunda oportunidad" y para "reparar aquello que en el año que terminó hicimos mal". En este período especial que inicia con Rosh Hashaná hasta el Día del Perdón, Polakoff señaló que la comunidad espera estas fechas como "un período de introspección, de reflexión y un balance del alma para que el año que está comenzando tenga mejores perspectivas del que está terminando".